Esteponera de origen marroquí, el de su madre, Nuria Benzal también ha tenido que emigrar. Estuvo en el Zajecar serbio, y ahora milita en el Fehervar, en el interior de Hungría, donde sufre temperaturas invernales de hasta -20 grados. Sin embargo, consigue ganarse la vida con el balonmano. La central dejó de contar en una etapa con la selección, la de los dos bronces, pero ha vuelto con nuevos bríos.
-El bronce olímpico, ¿cree que concede una presión añadida cara al próximo Mundial? ¿Cuál será el objetivo de la selección?
-El reto es conseguir una medalla, pero hay que tener los pies en el suelo. No queda más remedio que ir pensando a partido, porque el campeonato es muy largo.
-¿Cuáles cree que serán sus mayores rivales?
-Hay muchos equipos fuertes. Corea, Noruega, Montenegro, Serbia, que juega en casa... Dependerá todo de los cruces.
-¿Le molesta que se las conozca como las 'guerreras'?
-Que va. Lo llevamos bien, es muy nuestro.
-¿Es para usted una espina clavada no poder lucir la medalla olímpica de Londres?
-No. En absoluto. No entré en los planes de la selección, pero no estaba lesionada. Gané la plata en el Europeo de Macedonia de 2008 y desde entonces solo me he perdido el Mundial de Brasil y esos Juegos.
-Se habla del monocultivo periodístico del fútbol, pero ¿cree que cada vez se las reconoce más?
-Se nos valora de forma intermitente, depende de si conseguimos algo.
-¿Cuál cree que va a ser su rol en esta selección?
-Soy una jugadora que puede defender y atacar. Dependerá de las decisiones técnicas. Voy a estar dispuesta a hacer lo que me digan y a hacer grupo.
-En España ya resulta complicado vivir del balonmano, ¿verdad?
-Es actualmente imposible dedicarse a esto en España. Yo lo hago en Hungría, donde hablo en inglés con mis compañeras o me entiendo por gestos.
-¿Dónde se forjó como jugadora de balonmano?
-Empecé en el Colegio Antonio Machado. Después pasé a la Escuela Municipal de Balonmano de Estepona, al Estepona y, a los 15 años, me fui a Valencia. A los 18 ya jugaba en la élite.
-Defina a su compañera Marta López como jugadora y en cuanto a su personalidad.
-En la cancha es explosiva y muy ofensiva. Es una chica extravertida.
-¿Qué consejo le daría a una jugadora malagueña de cantera que aspira a seguir su camino?
-Le diría que siga luchando por lo que tiene, que nunca se rinda. Quien la sigue la consigue, y esto es vedad. Te puedes encontrar más o menos obstáculos, pero nunca pierdes el tiempo. Ganas experiencia.
-¿Cuántos días al año pasa en tierras costasoleñas?
-Poco. En Navidad estaré solo dos días. Tres semanas al año. Echo de menos a mi gente, el calor y la playa.
